Es bueno aprender a probar cosas nuevas. Obviamente hay que trazar un límite en alguna parte, por ejemplo con las cosas nocivas como las drogas o abiertamente peligrosas. Este punto parece un buen sitio para decir "no pruebo eso".
Pero, en cuanto a las cosas razonables, no deberías de ponerte límites. Por ejemplo probar una nueva receta, ir a una senda de montaña, al karaoke y muchas más cosas. La razón: nunca sabrás realmente si te gusta hasta que lo intentas. Por lo tanto, hay que tirar para delante cuando se nos presente una nueva oportunidad de probar algo diferente.
Recuerda también que las cosas buenas estimulan la risa y la complicidad, y reirse es bueno para la salud, sobre todo si es en buena compañía.
Hubo un tiempo en el que todo lo que hacíamos era una novedad: el primer día de clase, un nuevo trabajo, nuevo color de pelo y, como no, el sexo. Incluso las cosas que ahora nos resultan más banales y cotidianas las hicimos alguna vez por primera vez; como cuando aprendimos a caminar. Pero empezaste a hacerlas, ¿y no mejoró tu vida ahora que sabes que echar frutos secos sobre el helado es delicioso?
Siempre sucede igual con todas las cosas, hasta con las que en un principio nos parecían aterradoras: como depilarse por primera vez o probar una comida demasiado exótica para nuestros gustos. Es posible que hasta encuentres una nueva receta que luego se convierta en tu comida favorita. ¿Quién sabe?
Hemos buscado las mejores razones por las que por qué nunca deberías de tener miedo a probar algo nuevo o, al menos, intentarlo aunque tengas miedo o reparo.
Nada se consigue dejándose vencer por el miedo
¿Crees que los grandes artistas de la música o del cine permiten que las cosas que les asusten les pongan freno? Para nada.
Es difícil conseguir algo cuando estás constantemente evitando la vida y los nuevos desafíos. Prueba más cosas y presta atención a lo nuevo de tu entorno para tener éxito en vivir una vida plena y divertida.
Permite que el "sí" y el "puedo hacerlo" defina tu existencia. Acepta cosas nuevas con los brazos abiertos y con positividad: nunca sabes a dónde te puede llevar algo que ahora mismo te parece aterrador. ¡Podría ser a un lugar increíble o al éxito profesional o amoroso!
Una forma activa de vender nuestros miedos es utilizar afirmaciones positivas: estas nos ayudan a centrar nuestros objetivos y a progresar de la forma en la que queremos.
Vivir con remordimientos no es bueno
¿Nunca te ha pasado que te han ofrecido algo nuevo y has dicho que no, solo para arrepentirte más tarde de no haber aceptado? A todos nos ha sucedido alguna que otra vez.
Es especialmente desanlentador ver a otras personas haciendo, e incluso triunfando, en algo en lo que una vez tuviste demasiado miedo de intentar. Esto te da la clara sensación de que te has fallado a tu propia persona por comportarte como un gato asustadizo. La mejor manera de no llegar a arrepentirte de las cosas que no hiciste es hacerlas.
Te dará más confianza
Hay algo realmente gratificante en probar algo nuevo. Incluso si fallas o no te gusta, no importa. Ser audaz y esforzarte te inculcará mucha más confianza ti mismo. Porque sea lo que sea lo que intentes, sobrevivirás. Saldrás más curtido y con más experiencia.
Son esas mismas cosas las que te empoderan y te convierten en una persona audaz que consigue lo que se propone. Incluso en la más pequeña de las victorias, se da un pequeño paso hacia delante.
Te convertirá en una persona más interesante
Si te paras a pensar, las mejores conversaciones que has tenido han sido con personas que tienen vidas interesantes. Son ese tipo de personas, las que intentan las cosas, viajan prueban lo nuevo y le sacan "todo el meollo a la vida" con las que más disfrutamos.
Cuantas más cosas intentes, más cosas sabrás y más dinámicas serán tus relaciones con los demás.
Te lo mereces
Todos merecemos disfrutar, sonreir, saborear la vida y, en definitiva, ser felices. Lo nuevo y desafiante es lo que más vamos a rememorar y, cada vez que lo recordemos, mejor nos sentiremos.
Te mereces sentirte bien con tu persona, estar a gusto contigo mismo y sentir la felicidad que te está reservada.
Crecerás como persona
Cuando algo nuevo no pone en peligro la vida, ¿qué tenemos que perder? En estos casos solo hay posibilidades de crecer y de ganar. Considerando que solo tienes una oportunidad en esto, lo mejor es aprovecharla al máximo.
Nunca sabes lo que va a encontrar
Es posible que no te guste esa cosa nueva que acabas de probar ¿Y, qué? Esto solo significa que ha marcado una cosa más en tu lista de experiencias.
Y si te gusta, aun es mejor. Has abierto la puerta a un nuevo mundo de sensaciones y posibilidades. Pero nunca lo sabrás si no lo intentas.